Actualmente, es común ver productos ecológicos. Pero… ¿Sabemos realmente qué significa? ¿Qué diferencia hay entre los que no lo son?
Existe una gran cantidad de productos apícolas lo que lleva a las empresas a buscar la diferenciación frente a sus competidores para ser el elegido. Cuando se habla de productos apícolas, se hace referencia principalmente a la miel y en segundo lugar, a otros productos el propóleo o el polen.
El MAPAMA y el BOE ya han definido el concepto de ecológico. El objetivo es evitar el uso cualquier tipo de sustancia química para poder garantizar la conservación del medio ambiente y poder ofrecer alimentos naturales sin ningún residuo tóxico.
La apicultura convencional es aquella cuyo sistema de producción requiere un consumo de productos químicos, es decir, es todo lo contrario a la ecológica. El medio ambiente no es una de sus principales preocupaciones ya que el uso de los tratamientos de la agricultura convencional es dañino para las tierras. Puede llegar a afectar a la salud de los que consumen los productos que se obtienen.
Existen estudios (Ortega, 2009) que indican que la agricultura ecológica favorece la conservación de la biodiversidad debido al cuidado del medio ambiente. Se logra obtener productos con mejor sabor y textura.
Pese a que la agricultura ecológica reduce el uso de pesticidas, tiene una productividad mucho menor que la convencional (aproximadamente un 20% menos). Si queremos obtener la misma cantidad de productos convencionales y ecológicos, la superficie de la explotación ecológica debería ser al menos un 25% más grande.
Por lo general, los productos ecológicos son más caros que los convencionales debido a que la producción es más costosa ya que se requieren espacios más grandes y más mano de obra.
Una colmena ecológica produce menos miel que una convencional
En Miel de León apostamos por la apicultura ecológica ya que creemos que es la base de la sostenibilidad a largo plazo, y sus innumerables beneficios hacen que sigamos mejorando en esta línea nuestros procesos productivos para alcanzar siempre la mejor calidad posible.